Los mejores consejos para trabajar de noche y que afecte a tu descanso
Consejos para trabajar de noche y que tu horario no afecte a tu descanso.
Debido a las funciones de determinadas profesiones, hay trabajadores que tienen que adaptarse a trabajar de noche. Algunos trabajan únicamente durante la noche y otros trabajan en distintos turnos, incluyendo el nocturno. En ambos casos, conseguir dormir el número de horas necesarias y descansar correctamente se vuelve una tarea complicada. Sin embargo, al igual que en cualquier trabajo diurno, el descanso sigue siendo un factor principal si queremos desempeñar correctamente las funciones que requiere nuestro trabajo, así como las actividades correspondientes en nuestra vida diaria.
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No descansar correctamente debido a un trabajo nocturno puede acarrearnos muchos problemas de salud, tanto físicos como psicológicos. Además, con la falta de sueño y descanso, nos volvemos más vulnerables a sufrir un accidente laboral. Lo cual, en el peor de los casos, puede llegar a costarnos la vida.
Para que esto no ocurra y tu trabajo de noche no te impida descansar correctamente y llevar una vida sana y cómoda, te damos algunos consejos que te serán útiles si estás intentando adaptarte a este estilo de vida.
Ponte un horario diurno de descanso. Si trabajas de noche, es evidente que no te queda más remedio que dormir de día. Lo mejor es que te acostumbres cuanto antes a tu nuevo horario de descanso. Quizás buscar cada día el mejor hueco para dormir no te haya funcionado hasta ahora, así que lo más efectivo es que reserves al menos seis horas fijas durante el día para dormir. En estas horas no debes hacer planes ni saltártelas, ya que es tu hora de dormir. En el caso de que tu turno no sea fijo y tengas que hacer también algunos turnos diurnos, distribuye tus horas de sueño entre las del día y alguna siesta en tu horario libre, después de hacer tu turno.
Recurre a técnicas de relajación. A muchos trabajadores se le hace difícil dormir y descansar correctamente en horarios diurnos. Para estos casos, resulta muy efectivo recurrir a técnicas de relajación. Por ejemplo, puedes hacer estiramientos relajantes o ejercicios de respiración que te ayuden a eliminar el estrés de la jornada laboral. Esto te hará más llevadera la transición entre el trabajo y el descanso, aunque tengas que dormir durante el día.
Cuida tu alimentación. Con los turnos de noche todo se desestabiliza, y también nuestra alimentación. Es habitual que los trabajadores nocturnos recurran a la comida rápida y a picar entre horas, ya que llevan horarios diferentes al del resto. El problema es que esto hará que el descanso sea aún más difícil. Trata de mantener unos horarios de comida en la medida de lo posible y que tu alimentación sea sana y equilibrada. En el caso de que tengas que picar entre horas, por ejemplo, durante tu turno de trabajo, recurre a alimentos sanos como la fruta, los frutos secos o los yogures. Evita también comer en abundancia justo antes de salir del trabajo, ya que esto te hará aún más difícil la tarea de dormir durante el día.
No tomes estimulantes. Los trabajadores nocturnos acostumbran a abusar de los estimulantes como la cafeína durante su jornada laboral. Recurren al café como única forma de mantenerse despiertos durante toda la noche pero, sin embargo, esto puede ser contraproducente. Abusar de la cafeína durante la noche puede hacer nos resulte prácticamente imposible dormir cuando lleguemos a casa. Si descansamos poco, al día siguiente tendremos que volver a recurrir al café para aguantar despiertos toda la noche. De esta forma entraremos en un ciclo que nos hará dependientes de la cafeína. Si duermes bien durante el día, no te será necesario tomar tanta cafeína durante la noche. Si lo haces, hazlo al principio del turno y deja de tomarla cuando te queden pocas horas para salir.
Haz deporte. El deporte es la mejor forma de desconectar del trabajo, eliminar el estrés acumulado durante el día y cansarnos para poder descansar mejor. La actividad física es fundamental para llevar un estilo de vida saludable y descansar correctamente. Acostúmbrate a salir a correr tras tu turno o a dar una larga caminata hasta casa cuando termines de trabajar. Así conseguirás llegar a casa con ganas de dormir, con el cuerpo mucho más cansado y con tu mente más liberada.
El insomnio es una de las consecuencias más comunes en los trabajadores de turnos de noche. Por eso, poner en práctica estos consejos para no prescindir ningún día de tus horas básicas de descanso es muy importante si no queremos sufrir más consecuencias negativas de este horario de trabajo. La fatiga crónica, la depresión, la ansiedad o en estrés son otros problemas que se asocian a los turnos de noche. Además, a veces suelen provocar problemas en las relaciones sociales y familiares debido a la dificultad para conciliar tu vida laboral con la privada. Esto puede llevar a los trabajadores nocturnos a sufrir incluso dificultades para disfrutar de su vida sexual.
En cuanto a los problemas físicos, la obesidad, las úlceras de estómago, los ardores de estómago o la gastritis suelen ser las enfermedades más comunes asociadas a los turnos de noche.
Si quieres adaptar tu vida lo mejor posible a tu trabajo, sigue estos consejos para trabajar de noche.