Dormir mal puede arruinar su salud, su vida sexual y mucho más

Pasamos un tercio de nuestras vidas haciéndolo y, sin embargo, casi nadie se plantea cómo puede afectar a nuestra salud y bienestar la actividad que más tiempo nos consume: el sueño. En vísperas de la Semana de la Salud Masculina, hemos pensado que ya era hora de aclarar las cosas...


El sueño es un requisito biológico fundamental para la salud humana. Desde los deportistas de élite como Erling Haaland -cuya rutina de sueño es una auténtica belleza- hasta el trabajador medio, el sueño es un componente crucial de la vida diaria. Recientemente hemos informado de que los madrugones y las horas de acostarse de los australianos podrían estar salvándoles la vida, pero nuevos datos han revelado un panorama mucho más complejo y potencialmente preocupante.

Afortunadamente, la cultura en torno al sueño está cambiando rápidamente, pasando de ser un aspecto de la vida que hace veinte años se pasaba casi totalmente por alto a un área de intenso estudio y activismo a medida que se hace más clara la relación entre el sueño y los efectos adversos para la salud.

¿Las conclusiones de toda esa investigación? Resumiendo mucho: los trastornos del sueño y el sueño insuficiente pueden tener un impacto significativo en diversos aspectos de la vida, como la salud en general, la vida sexual, la función cognitiva, el bienestar mental e incluso la productividad en el trabajo.

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Pero, ¿cuáles son exactamente estos efectos adversos para la salud? Según la Fundación para la Salud del Sueño, hay mucho donde elegir. Afecciones del sueño como la apnea obstructiva del sueño (AOS) se han relacionado estrechamente con problemas de salud aparentemente no relacionados, como cardiopatías coronarias, accidentes cerebrovasculares, fibrilación auricular, diabetes, hipertensión, depresión, disfunción eréctil, deterioro cognitivo y mayor riesgo de mortalidad. Pero abróchese el cinturón, aún no hemos terminado: no dormir lo suficiente también puede tener toda una serie de efectos...

Los estudios han descubierto que dormir menos de seis o siete horas por noche puede aumentar el riesgo de obesidad, diabetes de tipo 2 y cardiopatías. La falta de sueño también puede afectar al metabolismo del organismo y reducir la tolerancia a la glucosa y la sensibilidad a la insulina.

Y lo que es aún peor, las personas privadas de sueño tienden a aumentar la ingesta de alimentos reconfortantes ricos en grasas y azúcares, ya sea para compensar la falta de energía obtenida tras una buena noche de sueño o para aliviar el estrés provocado por la falta de sueño, lo que duplica el riesgo inicial de obesidad y diabetes.

Pero aún hay más: dormir poco debilita el sistema inmunitario y aumenta el riesgo de contraer todo tipo de enfermedades, desde la gripe cotidiana hasta el cáncer. Además, tiene un profundo impacto en la función cognitiva y el bienestar mental. Se han descrito alteraciones del estado de ánimo, el pensamiento, la concentración, la memoria, el aprendizaje, la vigilancia y los tiempos de reacción en personas con problemas de sueño. ¿Alguna vez ha tenido problemas para concentrarse en el trabajo después de trasnochar o haber bebido demasiado? Esta es la razón.Dormir mal puede arruinar su salud, su vida sexual y mucho más

La disfunción eréctil es uno de los problemas de salud más comunes entre los hombres y se agrava enormemente por la falta de sueño. Imagen: Getty

Pero, ¿cuántos australianos sufren realmente problemas de sueño? Dadas las impresionantes estadísticas del país en lo que se refiere a madrugar y acostarse temprano, puede que te sorprenda saber que la prevalencia de los problemas de sueño es una preocupación importante.

Nuevos datos revelan que alrededor del 45% de los adultos australianos no duermen bien, ni en duración ni en calidad, y que la apnea del sueño diagnosticada afecta al 8% de los adultos. La encuesta también revela que la media de horas de sueño declarada es de 7 horas, con un 12% de personas que duermen menos de 5 horas y media cada noche.

¿A qué se debe? Los científicos creen que tiene mucho que ver con la aparición de la llamada "sociedad 24/7", en la que los horarios de trabajo prolongados o poco ortodoxos y el intenso trabajo de las tareas domésticas se combinan con las redes sociales, los dispositivos con conexión a Internet y la creciente dependencia de las bebidas energéticas para hacer que conciliar el sueño sea difícil y permanecer dormido aún más.

Aunque entendemos que no esté en condiciones de modificar radicalmente su horario de trabajo o su lista de tareas domésticas, hay algunas cosas que puede hacer para aumentar sus probabilidades de dormir bien...Dormir mal puede arruinar su salud, su vida sexual y mucho más

La nueva bebida energética de KSI y Logan Paul, Prime, es para no dormir. Imagen: Canberra Times

Dejando a un lado el pesimismo, he aquí algunos puntos de partida para dormir mejor: según los especialistas, establecer un horario de sueño constante es clave. Intenta acostarte y levantarte a la misma hora todos los días. También puedes intentar crear una rutina antes de acostarte, como leer un libro o darte un baño caliente, para indicarle a tu cuerpo que es hora de relajarse.

Asegúrese de que su entorno de sueño es óptimo manteniendo la habitación fresca, oscura y silenciosa y limitando la exposición a dispositivos electrónicos antes de acostarse siempre que pueda. Por último, evite la cafeína, la nicotina y las comidas copiosas cerca de la hora de acostarse.

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