¿Qué es la enfermedad de Paget y cuáles son sus síntomas?
Enfermedad de Paget: ¿qué la causa y cuáles son sus síntomas?
La enfermedad de Paget es una enfermedad que afecta a los huesos, los cuales se deforman por una decostrucción y una regeneración anormal de los mismos. Se produce una descomposición anormal del tejido óseao en determinadas zonas del cuerpo, lo que hace que la formación ósea sea anormal y aparezca un hueso más grande, pero también más débil, el cuál está lleno de nuevos vasos sanguíneos.
Los huesos que se ven afectado por la enfermedad pueden ser tan solo uno o dos en todo el cuerpo. Los que se ven afectados habitualmente son la pelvis, la columna, el cráneo, la pierna, los brazos o la clavícula.
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Aunque no se tienen claras las causas por las que una persona llega a desarrollar esta enfermedad, esta puede deberse a una infección en los primeros años de vida o bien a factores genéticos.
¿A qué personas afecta la enfermedad de Paget?
Esta enfermedad puede aparecer en cualquier persona y en cualquier parte del mundo, pero hay algunas zonas donde se dan más casos de la enfermedad de Paget, como son Europa, Nueva Zelanda y Australia. En los últimos 50 años, el número de personas afectadas por esta enfermedad ha disminuido considerablemente y cada vez son menos los casos que se diagnostican.
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de Paget?
Uno de los síntomas que ayuda a los médicos a diagnosticar esta enfermedad en su primera fase es un aumento de la cantidad de calcio en la sangre mediante pruebas y análisis. Si al paciente se le hace una radiografía, también en ella pueden observarse cambios en su estructura ósea que lleven al médico a diagnosticar la enfermedad.
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Además de estas dos cosas que facilitan el diagnóstico una vez que acudimos al médico, hay algunos síntomas previos que nos pueden ayudar a detectar la enfermedad. Estos son dolores intensos en el cuello, en los huesos o rigidez articular. El arqueamiento de las piernas o las deformidades en el cráneo y la cabeza son también síntomas característicos de la enfermedad de Paget.
Otros síntomas más sutiles que se pueden presentar son el dolor de cabeza, las fracturas de huesos o el aumento de temperatura en las zonas del cuerpo que se han visto afectadas. Ante estos síntomas, lo que debemos hacer es acudir a un médico para realizarnos las pruebas necesarias para diagnosticar la enfermedad. Estas suelen incluir una radiografía ósea, una gammagrafía ósea y análisis para comprobar los niveles de calcio.
¿Qué tratamiento deben seguir los que sufren esta enfermedad?
En cuanto la enfermedad es diagnosticada, muchos pacientes inician un tratamiento para impedir que aparezcan las malformaciones asociadas a la enfermedad de Paget. En otros casos, los enfermos no necesitan seguir ningún tratamiento y únicamente deben estar controlados por un médicos, acudiendo a realizarse análisis cada cierto tiempo. Este sería el caso en los que la enfermedad de Paget no se encuentra activa.
Cuando hay huesos afectados o los cambios en la estructura ósea se están produciendo con cierta rapidez, sí hay que iniciar un tratamiento concreto. También es necesario tratamiento en el caso de que los dolores que se asocian a los síntomas de la enfermedad sean demasiado intensos e impidan a la persona enferma llevar una vida normal.
En otros casos, el tratamiento se enfoca a reducir los niveles de cálcio en la sangre o a prevenir la hipoacusia, es decir, el aumento del tamaño del cráneo.
¿Tiene cura la enfermedad de Paget?
En la mayoría de los casos, los enfermos de Paget consiguen controlar su enfermedad y seguir con su vida de forma normal gracias al tratamiento. Un menor número de casos acaban desarrollando cáncer de huesos y algunos de ellos necesitarán astroplasia.
Aunque lo habitual es que el tratamiento sea suficiente y que nuestro médico nos de las instrucciones necesarias para llevar de la mejor forma posible la enfermedad, puede que surjan algunas complicaciones que haga que debamos tomar otras medidas. Dentro de estas complicaciones se encuentran las deformidades, la paraplejia, la sordera, las insuficiencia cardíaca, las fracturas de huesos o la estenosis de la columna.
En este tipo de enfermedad, es importante que acudamos al médico en cuanto observemos algunos de los síntomas, aunque solo sea una. Unos análisis bastarán para descartar la enfermedad o para iniciar el tratamiento cuanto antes en el caso de que sea necesario. Nunca debemos saltarnos las indicaciones de los profesionales en ningún tipo de tratamiento para enfermedades graves de este tipo.
Afortunadamente, la enfermedad de Paget es cada vez menos común.
