Los espeluznantes hábitos de hidratación de Dwayne Johnson están a punto de provocar su cancelación
Fuentes que han trabajado con la superestrella de Hollywood han revelado los hábitos de Dwayne Johnson a la hora de orinar en el plató, que se suman a un patrón de comportamiento poco profesional aparentemente establecido desde hace tiempo.
Dwayne "The Rock" Johnson ha sido considerado durante mucho tiempo como uno de los tipos más generosos, auténticos y (obviamente) fornidos de Hollywood, y se ha ganado el respeto de sus compañeros de reparto y de los fans de todo el mundo. Sin embargo, un nuevo informe condenatorio que cita a personas de la industria que han trabajado con el ex luchador de la WWE puede estar a punto de hundir su reputación casi intachable.
El peso pesado del mundo del espectáculo se enfrenta a un camino difícil a la luz de las revelaciones sobre su comportamiento en el rodaje, en particular su inusual hábito de usar "botellas de orina". Si bien su carrera ha estado marcada por un éxito de taquilla sin precedentes, su última película, Red One, ha estado plagada de problemas de producción que, a su vez, han arrojado una luz especialmente dura sobre los hábitos de hidratación poco ortodoxos de Johnson.
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El uso de botellas para orinar -una práctica que Johnson emplea para ahorrar tiempo en el rodaje- ha suscitado polémica y disgusto entre los miembros del equipo. A pesar de los previsibles intentos de restar importancia al asunto por parte de miembros del equipo de Johnson, algunos informadores han revelado el cuestionable grado de dependencia de Johnson de estos urinarios improvisados, pintando la imagen de una estrella que prioriza la comodidad personal sobre la decencia y la discreción.
Según fuentes cercanas a la producción, la afición de Johnson por las botellas de pis viene de lejos en varios platós, entre ellos Ballers, de HBO, y la película de 2018 Rampage. Algunos rumores sugieren incluso que se ha dejado a miembros del equipo la desagradable tarea de deshacerse de estos recipientes -una dimensión de estos informes que el equipo de Johnson niega con especial vehemencia-, añadiendo una carga totalmente innecesaria y un tanto espeluznante a sus ya exigentes trabajos.
Aunque Johnson considera que el uso de botellas de orina es una solución práctica a su innegable apretada agenda, sus detractores sostienen que refleja una total falta de consideración hacia quienes le rodean. Los miembros de la tripulación afirman que merecen trabajar en un entorno profesional libre de condiciones insalubres y sin límites, y que el comportamiento actual de Johnson socava tales normas.
"Suelo mantenerme bastante hidratado. Necesito ir al baño a menudo. No mucho, pero probablemente un par de veces durante cada entrenamiento tengo que ir al baño. Así que saco la botella...".Johnson habla con Esquire en 2021
Los problemas con la botella de pis parecen ser la culminación de un patrón más amplio de desprecio por los demás y un sentido de derecho que está llegando a definir la reputación de Johnson dentro de la industria. Los informes de retrasos crónicos y enfrentamientos con sus compañeros de reparto -incluido Ryan Reynolds, con quien Johnson habría tenido una "gran pelea"- subrayan aún más lo que podríamos llamar su problemática relación con la profesionalidad.
En una industria en la que la colaboración y el respeto son primordiales -especialmente en la era posterior al #MeToo, que ha llevado el mal comportamiento de los peces gordos de Hollywood al centro del discurso-, las acciones de Johnson en el set crean un precedente preocupante. Aunque su poder de estrella puede haberle protegido de las consecuencias hasta ahora, la reacción en torno a Red One sugiere que la marea puede estar cambiando en esta roca una vez inamovible...
