La ciencia detrás del trastorno
El actor Bruce Willis, cuyos chistes son un pilar de las películas de acción más taquilleras, se aleja de su carrera debido a un diagnóstico de afasia, un trastorno neurológico que afecta al lenguaje y al habla, según las noticias.
La familia de Willis dijo en las redes sociales que el actor tenía problemas "cognitivos" debido a su reciente diagnóstico. Este trastorno se deriva de un daño en la parte del cerebro dedicada al lenguaje, normalmente el lado izquierdo, según la Johns Hopkins Medicine. Ese daño puede ser el resultado de un accidente cerebrovascular, una lesión en la cabeza, un tumor cerebral, algún tipo de infección o demencia. Los síntomas -que implican dificultad para hablar y comprender- pueden aparecer de forma repentina tras un ictus o un traumatismo craneal, o gradualmente como resultado de un tumor cerebral o una enfermedad progresiva.
"A los increíbles seguidores de Bruce, como familia queríamos compartir que nuestro querido Bruce ha estado experimentando algunos problemas de salud y recientemente ha sido diagnosticado con afasia, lo que está impactando en sus capacidades cognitivas", dijo su exesposa y también actriz Demi Moore en un comunicado en Instagram. "Como resultado de esto y con mucha consideración Bruce se aleja de la carrera que ha significado tanto para él".
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Existen dos grandes categorías de afasia, denominadas fluida y no fluida; dentro de estas categorías hay diferentes grupos que se distinguen tanto por la zona dañada como por los síntomas. El tipo más común de afasia no fluida es la llamada afasia de Broca, que se produce cuando se daña una parte del lóbulo frontal, normalmente en el lado izquierdo, según Johns Hopkins Medicine. Los síntomas de la afasia de Broca -también llamada afasia expresiva- incluyen problemas de habla en los que la persona elimina ciertas palabras de su lenguaje y habla en frases cortas; una persona con este trastorno puede, por lo general, entender algo de lo que dicen los demás. Sin embargo, como la afasia de Broca se deriva de un daño en la parte frontal del cerebro, puede afectar a los movimientos, lo que provoca debilidad o parálisis en el lado derecho del cuerpo.
Las personas diagnosticadas con afasia de Wernicke, que es el tipo más común de afasia fluida, tienen daños en el área de Wernicke de la parte del cerebro dominante del lenguaje. En lugar de omitir palabras y hablar con frases cortas, una persona diagnosticada con afasia de Wernicke, o receptiva, pronuncia frases largas y confusas, añadiendo palabras tanto innecesarias como inventadas, según Johns Hopkins. Las personas con afasia de Wernicke también suelen tener problemas para entender lo que dicen los demás.
La llamada afasia global se produce cuando se daña una gran parte del lado del cerebro que domina el lenguaje. La afasia global puede provocar graves dificultades para hablar o comprender el lenguaje.
No se ha informado del tipo de afasia que se le ha diagnosticado a Willis, que ha cumplido 67 años este año, ni de si ha sufrido un derrame cerebral que le haya provocado la afasia. Sin embargo, la afasia suele diagnosticarse en la mediana edad o más tarde, aunque puede darse en niños pequeños. Según el Instituto Nacional de la Sordera y otros Trastornos de la Comunicación, cerca de un millón de personas padecen afasia en Estados Unidos. Según el NIDCD, el tratamiento puede incluir la terapia del habla y la formación en el uso de ayudas a la comunicación que permiten a la persona "hablar" mediante imágenes, gestos e incluso dispositivos electrónicos.
