Fregar te ayuda a relajarte
Un nuevo estudio de esos que nos gustan tanto afirma que fregar relaja. En serio. Eso dicen.
¿Que fregar relaja? Bueno, eso dicen. Ya sabíamos eso de la respiración, el ejercicio, las infusiones... pero ¿Fregar? ¿Qué demonios? ¿Por qué se empeñan los estudios en convencernos de que hacer cosas que no nos gustan es beneficioso? ¿Comer brocoli es tan bueno como parece? ¿De verdad que tenemos que matarnos a correr para que nuestro funcione? Pues sí. Y ahora, a todo esto, hay que añadirle el noble arte de lavar los platos.
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Un estudio de la Universidad Estatal de Florida le pidió a 51 estudiantes que lavaran los platos durante un día. O sea, no que se llevaran 24 horas lavando platos, sino que hiciesen esa actividad a lo largo del día. Claro, para los estudiantes eso es un esfuerzo titánico, que ellos no están acostumbrados. Pues parece ser que la combinación del olor del jabón, el sonido del agua, la concentración al lavar los vasos, cubiertos, platos, bandejas... ayuda a relajarnos. Además, nos aleja de los pensamientos negativos al tener la mente ocupada y enfocada en la tarea que estamos haciendo, que si no prestamos atención los vasos pueden ir muy lejos y acabar partiéndose, que no está la economía como para ir rompiendo vasos a diestro y siniestro.
No nos lo esperábamos, la verdad, pero sí, fregar relaja. Así que no esperes más, vete a la cocina y termina de limpiar lo que te queda. Que ya huele.