6 cosas que no debes hacer nunca en el gimnasio
Queremos que te portes bien y que no llames la atención en exceso ni seas un habitante incómodo para el resto, por esto, te traemos estos consejos infalibles para no morir apaleado por el resto: ¡6 cosas que no debes hacer nunca en el gimnasio!
1.Construir un fuerte con las pesas.
Vas a empezar tu entrenamiento, eliges el banco y llega el turno a las mancuernas. Unas ligeras para calentar, otras más pesadas para la primera serie, otras para la segunda, otras para la tercera y esas que son super gordas y que soy incapaz de levantar pero sirven para presumir si pasa una chica. Y de repente estás rodeado de unas 30 mancuernas y todo el gimnasio te mira fatal. Y con razón. No existe nada más odioso que el diógenes de la gimnasia. Coge sólo lo que vayas a usar. Por favor. Se bueno.
2.Llevar ropa que no sea adecuada para hacer deporte.
Al gimnasio se va a sudar y a entrenar. Y punto. No es un desfile, aunque a veces lo pueda parecer. Tampoco es un photocall de un estreno hollywoodiense. Ve en chandal, lleva ropa a la que no tengas demasiado cariño y ponte un calzado adecuado. Eso es entrenar con dignidad.
3.Gritar como un poseso.
Sin duda una de las cosas que más aturden en el gimnasio y que te generarán más antipatías. Imagina estar entrenando con normalidad y de repente escuhar un rugido salvaje. "¡¡¡aaaaAAAAARRRGG!!". Cuando eres nuevo piensas que alguien ha sido apuñalado. Cuando ya llevas unos días, ya has identificado a ese ser que puebla la fauna de todo gimnasio: El gritón. Sabemos que el esfuerzo de levantar mucho peso se puede hacer más llevadero si nuestra garganta lo acompaña. Un gruñido sutil está bien. Pero gritar para que todo el gimnasio se entere de lo mucho que estás levantando, te hará parecer tonto del culo. Sin ofender, sólo te transmitimos lo que la mayoría de la gente piensa.
4.Ser un mirón.
Ya sea utilizando los espejos como retrovisores, o directamente, mirar fijamente el culo de la chica que está haciendo step o quedarte embobada con los músculos del monitor de spinning no te ayudará a ponerte en forma e incomodará a tus víctimas. Relájate. Date una ducha fría. No te comportes como un pervertido.
5.Estar pendiente de tus redes sociales.
Llegas al gimnasio, la maquina más cotizada está libre. ¡Aleluya! Pero entonces plantas tu toalla, te sientas y de repente te surge algo mucho más importante que entrenar: "A ver que se cuentan mis followers" Y durante los siguientes 10 minutos estás ocupado escribiendo, like arriba, like allá, mientras otros esperan a usar la máquina. Si te dan un puñetazo luego no llores. ¡Al gimnasio se va a entrenar!
6.Ser la mala de blancanieves.
Aunque te parezca increíble, los espejos del gimnasio están por una razón más allá de enamorarte de ti mismo: Mirarte para ejecutar los ejercicios de forma adecuada. No pasa nada por mirarte de vez en cuando, pero estar atrapado por tu maravilloso reflejo te condenará como a un "Dorian Gray" del fitness. No seas demasiado vanidoso. No es bueno.
Te garantizamos que siguiendo a rajatabla estos consejos y evitando las 6 cosas que no debes hacer nunca en el gimnasio, serás una buena persona que merecerá el respeto de todos. Te ganarás el cielo de los cachas. ¿Acaso existe un lugar mejor?