Vino para adelgazar: una copa antes de dormir
¿Sabes que el vino es bueno para adelgazar? ¡Otro beneficio más!
Y no estamos hablando de que el vino, por sí mismo, tenga unas cualidades milagrosas que te hagan perder la grasa así como así, que incluso te puede ayudar cuando vas al gimnasio, sino que tiene mucho más que ver con el sentido común. Resulta que si nos tomamos una copa de vino después de las comidas estaremos mitigando las ganas de picar otras cosas que, sin duda, nos van a hacer engordar más, y eso para la inminente operación bikini/bañador que llega es pecado mortal. ¿Qué mejor que beberse una copita de vino de postre que esa onza de chocolate o, peor, ese bollo industrial que nos mira, con ojos lujuriosos, desde la alacena?
Beber vino antes de dormir podría ayudarnos a adelgazar
Una copa de vino equivale a una hora de gimnasio
En 2010, en su libro "La semana de 4 horas", Tim Ferriss ya contaba que una copa de vino tomada por la noche, después de cenar, eliminaba radicalmente las ganas que puede tener uno de picar algo que no debe: ya sabemos que por la noche, todo lo que se come se queda. A ver, no es del todo así, pero si nos tenemos que saltar un poco la dieta, mucho mejor si pecamos por la mañana, a medio día o durante el almuerzo. Saltarse la dieta muy de vez en cuando es, incluso, saludable, pero recuerda que muy de vez en cuando es eso, muy de vez en cuando, no días alternos.
La Universidad de Harvard también realizó un estudio al respecto con 20.000 mujeres, de las cuales las que bebían regularmente vino eran menos propensas a padecer obesidad. Así que ya sabes, a la larga lista de beneficios del vino tenemos que añadir otro: nos quita las ganas de picar cosas que no debemos. ¡Aleluya!
