Por qué no debe ducharse durante una tormenta eléctrica
¿Qué es eso de que no se puede tomar una ducha o un baño durante una tormenta? Resulta que existe un riesgo real para la salud. A continuación te explicamos por qué no debes ducharte si hay tormenta y qué puedes hacer en su lugar.
¿Qué ocurre durante una tormenta?
El trueno y el relámpago se juntan durante una tormenta. Los rayos pueden ser especialmente peligrosos. Un rayo es básicamente una chispa gigante de electricidad en la atmósfera entre las nubes, el aire o el suelo.
La mayoría de los relámpagos producidos por las tormentas comienzan dentro de una nube. Si va a impactar contra el suelo, se desarrolla un canal de energía que desciende hacia la superficie terrestre. Cuando el rayo se aleja unos cien metros del suelo, objetos como árboles, arbustos y edificios empiezan a enviar chispas de energía (invisibles) para salir a su encuentro. Cuando una de esas chispas se conecta con el canal descendente, una enorme corriente eléctrica desciende rápidamente por el canal y se produce una sobretensión.
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¿Cómo pueden afectarle los rayos?
Los rayos pueden afectar a las personas de diversas maneras:
- De un impacto directo (cuando te cae un rayo directamente, suele ser mortal).
- Una lesión por contacto (cuando un rayo alcanza algo que estás tocando)
- Una corriente de tierra (cuando un rayo cae al suelo y la corriente de tierra pasa desde el punto de impacto, a través del suelo, hasta llegar a usted)
Alrededor del 10% de las personas alcanzadas por un rayo mueren, normalmente de un ataque al corazón. También se pueden sufrir lesiones graves como traumatismos contusos, síndromes neurológicos, lesiones musculares, lesiones oculares, lesiones cutáneas y quemaduras.
¿Por qué no hay que ducharse durante una tormenta?
Un dato aterrador: los rayos pueden atravesar las tuberías y el agua, y alcanzarte mientras te duchas.
"Las tuberías y otros metales de nuestras casas pueden servir de conducto para la corriente eléctrica", afirma el doctor Jeffrey A. Andresen, profesor de geografía, medio ambiente y ciencias espaciales de la Universidad Estatal de Michigan. "Si tiene muy mala suerte y entra en contacto con alguna de las tuberías u otros metales de su casa y cae un rayo, podría resultar gravemente herido, o algo peor, ya que la electricidad atraviesa el metal", afirma Anderson.
Pero el problema no es sólo el metal: Según la doctora Mary Ann Cooper, experta en rayos y profesora emérita de la Facultad de Medicina de la Universidad de Illinois en Chicago, el agua también puede transportar las corrientes eléctricas de los rayos.
Así que, básicamente, ducharse durante una tormenta te deja expuesto a un doble golpe de electricidad que puede viajar a través de tus tuberías y del agua que hay en ellas para darte una descarga mientras intentas limpiarte.
¿Por qué ocurre todo esto? Los rayos intentan encontrar un camino hacia el suelo, explica Jeffrey Peters, coordinador del programa de meteorología severa y experto en seguridad contra rayos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA). "Si un rayo cae directamente en una casa o entra en el edificio a través del cableado, las tuberías o el cable del teléfono fijo, la electricidad seguirá el camino de menor resistencia a través de los cables o las tuberías para llegar al suelo", explica Peters.
¿Cuáles son los riesgos de ducharse durante una tormenta?
El Dr. Nicholas Kman, médico de urgencias del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio, afirma que si te duchas durante una tormenta eléctrica y te cae un rayo, puedes correr el riesgo de sufrir lesiones:
- Entumecimiento y hormigueo
- Desmayo
- Quemaduras por el calor del agua
- Parada cardíaca
- Muerte
El doctor Joseph Dwyer, profesor de Física de la Universidad de New Hampshire, está de acuerdo. "Es posible que un rayo mate a alguien que se está bañando o duchando, así que la opción inteligente es no arriesgarse".
El Dr. Kman dijo: "He sido médico de urgencias durante 13 años y no he visto a nadie alcanzado por un rayo en su casa". Aún así, aconsejó el Dr. Kman, estás haciendo un análisis de riesgo-beneficio en el que tienes algo menor como limpiarte en un extremo y la posibilidad de lesiones graves o la muerte en el otro.
También es importante recordar que estos riesgos no son específicos de las duchas o los baños durante una tormenta eléctrica, sino que hay que mantenerse alejado de todo lo que tenga que ver con tuberías cuando se ven rayos o se oyen truenos en el exterior: "La gente tiene que mantenerse alejada de todas las tuberías de su casa durante una tormenta eléctrica", dice Peters, "lo que incluye no tomar ni hacer lo siguiente: Ducharse, bañarse, lavarse el pelo en el lavabo o darse un baño con esponja", añadió Peters
¿Qué precauciones debe tomar
?La regla: si oye truenos a lo lejos, no intente apresurarse para darse una ducha rápida. "Si oye truenos, entonces está lo suficientemente cerca de la tormenta como para que los rayos lleguen a su ubicación, aunque no esté lloviendo en su casa", dijo Peters. "Los rayos pueden caer a una distancia de hasta tres a 10 o más millas de la tormenta madre", añadió Peters.
Lesionarse por ducharse durante una tormenta eléctrica no es algo que ocurra a menudo, pero puede ocurrir. "¿Es frecuente? No, pero es posible", afirma Cooper. "No hay garantías absolutas de seguridad, salvo evitarlo por completo", advierte Cooper.
Dwyer dice que incluso hay que evitar lavarse las manos o fregar los platos durante una tormenta. Si no tienes más remedio que limpiarte, lo mejor es que lo hagas con una toallita de baño o de maquillaje, o con un chorrito de agua de una botella.
Por lo general, los expertos recomiendan esperar 30 minutos desde la última vez que se oiga un trueno antes de ducharse o bañarse, por si acaso: "A veces, las tormentas pueden reservarse un gran trueno para el final, así que no querrás formar parte de ese gran final", explica Dwyer.
Un repaso rápido
Por lo tanto, aunque es poco frecuente sufrir lesiones al ducharse durante una tormenta eléctrica, es posible. Si te planteas ducharte durante una tormenta eléctrica, sopesa los riesgos de sufrir lesiones y de morir con la posibilidad de asearte.
