Ortorexia: cuando comer sano se convierte en trastorno alimentario
Ortorexia: la obsesión que convierte la comida saludable en un trastorno alimentario.
Cuando pensamos en trastornos alimentarios los primeros que se nos vienen a la mente son la anorexia o la bulimia. En estas dos enfermedades, las personas que los sufren se obsesionan por la cantidad de comida que ingieren, las calorías que estas tienen y cómo pueden afectar a su peso. En cambio, hay otro trastorno que cada vez es más común y que a menudo pasa por alto por responder a unos criterios diferentes.
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Se le conoce como ortorexia y se considera un trastorno alimentario desde el año 2000. Las personas que lo padecen no están obsesionadas con la cantidad de alimentos que ingieren si no con la calidad de los mismos. Se trata de una obsesión enfermiza por la comida saludable y ecológica que lleva a estas personas a consumir únicamente productos de los que conozcan su procedencia, que no hayan sido tratados con hormonas ni fertilizantes. Esto los lleva a reducir mucho la variedad de alimentos que consumen. Al tratarse de un trastorno psicológico, debe ser tratado con terapia.
Estas personas se caracterizan por dedicar gran parte de las horas del día a pensar una dieta saludable y a informarse sobre la procedencia de los alimentos que van a consumir. Cuando no consiguen controlar la procedencia de estos alimentos o conocer todos los datos sobre su elaboración y se ven obligados a no respetar su dieta, su estado de ánimo se resiente y sienten culpables y deprimidos.
Las personas con ostorexia ven la comida únicamente como una forma de mantenernos sanos, y todo lo demás pasa a un segundo plano en sus vidas. El sabor deja de ser importante, primando la procedencia del alimento sobre todo lo demás.
La ortorexia debe ser tratada con cualquier otro trastorno alimentario ya que a largo plazo puede perjudicar seriamente la salud de los pacientes, que también suelen ver disminuida su calidad de vida.
