La pobreza acorta la vida más que la obesidad o la diabetes y nadie advierte de ello
La pobreza acorta la vida más que la obesidad y la diabetes y casi tanto como el tabaco o el alcohol. Y nadie advierte de ello.
Un estudio publicado en la revista médica The Lacet informa de que hay un factor que acorta la vida tanto como el sedentarismo y mucho más que la obesidad, la hipertensión o el tabaco: la pobreza. Por este motivo, el estudio critica a la OMS (Organización Mundial de la Salud) por no hacer nada para combatir este factor y sí luchar contra los mencionados, siendo muchos de ellos menos peligrosos que la desigualdad económica.
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"El bajo nivel socioeconómico es uno de los indicadores más fuertes de la morbilidad y mortalidad prematura en todo el mundo. Sin embargo, las estrategias de salud global no consideran las circunstancias socioeconómicas pobres como factores de riesgo modificables", explican los autores del estudio.
Este macroestudio se realizó sobre los datos de más de un millón y medio de personas y, tras analizar su situación socioeconómica junto a otros factores como la obesidad o el tabaquismo, concluyó que la pobreza acorta la vida dos años, mientras que la obesidad la acorta 0,7 años y la hipertensión 1,6 años. El tabaco sigue siendo el factor que más acorta la vida (4,8 años).
Tal como declara el estudio, la OMS debería tomar medidas globales y llevar a cabo ciertas acciones para combatir la pobreza debido al riesgo para la salud que supone. Al igual que promueven el abandono del tabaco o el deporte, deberían llevar a cabo soluciones estructurales para combatir las desigualdades ya que está demostrado que la pobreza acorta la vida.