La píldora antiviral reduce en un 89% las hospitalizaciones y muertes por COVID-19, según Pfizer
Una nueva píldora COVID-19 reduce el riesgo de hospitalización o muerte en un 89% cuando se toma en los tres días siguientes al inicio de los síntomas, según ha anunciado recientemente Pfizer.
La píldora antiviral, PAXLOVID, se administró en un ensayo clínico controlado con placebo a personas con COVID-19 que tenían un alto riesgo de desarrollar una enfermedad grave. La píldora actúa inhibiendo una enzima llamada proteasa, que el virus SARS-CoV-2 necesita para seguir replicándose.
El fármaco era tan claramente eficaz que un comité independiente de supervisión de datos recomendó que se detuviera el ensayo para que las personas del brazo placebo del ensayo pudieran recibir el fármaco. Pfizer tiene previsto presentar los datos a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para obtener una autorización de uso de emergencia "lo antes posible", según un comunicado de la empresa.
Una nueva píldora antiviral reduce a la mitad el riesgo de hospitalización por COVID-19, según Merck
Las muertes por sobredosis en EE.UU. aumentaron durante los cierres de COVID-19
14 mitos sobre el coronavirus desmontados por la ciencia
En el ensayo clínico se inscribieron más de 1.200 adultos de EE.UU. y del extranjero que dieron positivo en la prueba del SRAS-CoV-2 y presentaban síntomas de leves a moderados. Los participantes tenían al menos una afección o característica subyacente que les hacía correr un alto riesgo de desarrollar una enfermedad grave. Según The New York Times, ninguno de los participantes estaba vacunado. Cada uno de ellos tomó PAXLOVID, en combinación con ritonavir (un medicamento contra el VIH que, según Pfizer, ayuda a ralentizar la descomposición del fármaco antivírico, lo que permite que permanezca en el organismo durante más tiempo), o un comprimido de placebo cada 12 horas durante cinco días.
De los 389 participantes que tomaron PAXLOVID en los tres días siguientes a la aparición de los síntomas, sólo tres fueron hospitalizados y ninguno murió, mientras que de las 385 personas que tomaron el placebo en los tres días siguientes, 37 fueron hospitalizadas y siete murieron.
Además, de los 607 participantes que tomaron PAXLOVID en los cinco días siguientes a la aparición de los síntomas (incluidas las personas que tomaron el fármaco en los tres días siguientes), seis fueron hospitalizados y ninguno murió. De los 612 que tomaron el placebo en los cinco días siguientes al inicio de los síntomas, 41 fueron hospitalizados y 10 murieron. Los efectos adversos fueron similares entre los grupos de placebo y del fármaco experimental y la mayoría fueron leves, según el comunicado.
Esta no es la primera píldora de COVID-19 que se desarrolla; la FDA está revisando actualmente la píldora de COVID-19 de Merck, conocida como molnupiravir, que, según la empresa, reduce las hospitalizaciones y las muertes por COVID-19 en un 50% si se toma en un plazo de cinco días, y que acaba de ser aprobada en el Reino Unido, según The Associated Press.
PAXLOVID es una versión modificada de un fármaco de hace décadas que se desarrolló por primera vez como terapia intravenosa durante la epidemia de SARS, pero que ahora se dirige específicamente al SARS-CoV-2 y puede tomarse en forma de píldora, según el Times.