¿Cómo tratar una piel con acné?
¿Cómo tratar el acné para que se cure en poco tiempo? Consejos para cuidar las pieles con granitos.
Aunque es uno de los problemas de salud más común en los adolescentes, también puede afectar a adultos. El acné es un trastorno de la piel que causado por la inflamación de los folículos capilares y las glándulas sebáceas. Su aparición suele estar relacionada con los problemas hormonales, pero también hay otros factores que pueden provocar acné como la alimentación, la falta de higiene o la predisposición genética.
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El acné no es un problema grave de salud y en la mayoría de los casos termina desapareciendo con los año, especialmente si nos informamos acerca de cómo debemos tratarlo o si nos ponemos en manos de un médico que nos recomiende un tratamiento concreto. En cambio, el acné, especialmente en adolescentes, puede tener un gran efecto negativo en las relaciones sociales ya que los adolescentes que los sufren suelen desarrollar un gran complejo que puede llegar a afectarle a la forma en la que se relacionan, causando inseguridad y, en algunos casos, incluso depresión.
Para tratar una piel con acné debemos seguir algunos consejos concretos que básicamente están relacionados con llevar una buena higiene y una buena alimentación. Estos son algunos consejos importantes para tratar pieles con acné.
Lava tu rostro a diario. Eliminar la grasa acumulada en el rostro y las impurezas es fundamental para evitar que el acné aumente. Para ello, debemos lavar el rostro al menos dos veces al día, una por la mañana y otra antes de irnos a dormir. Si hacemos ejercicio, también deberemos lavarla después de él para eliminar el sudor y evitar que se acumule más grasa en los poros. Cuando laves tu rostro, no frotes con fuerza para no irritar la piel con granitos. Puedes utilizar agua y jabón o añadir algún tónico recomendado para pieles con acné.
Exfolia tu rostro dos veces por semana. Exfoliar la piel es la mejor forma de eliminar la piel muerta y de mantenerla sana. Además, al exfoliarla estaremos eliminando la suciedad que suele obstruir los poros y formar los granitos o espinillas. Si exfoliamos el rostro a diario podría irritarse, pero si lo hacemos dos veces a la semana estaremos manteniéndolo sano y limpio. Utiliza algún exfoliante suave e hidratante o prepara alguno casero con productos naturales.
Utiliza aloe vera. Además de los productos y cosméticos que utilices para tratar tu piel, no debes olvidarte de los productos naturales y plantas que pueden servir para calmar la piel y que tienen grandes propiedades para tratar el acné. Una de las mejores plantas para ello es el aloe vera, la cual tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias y suele utilizarse para tratar problemas de la piel como las quemaduras leves o las irritaciones. Puedes aplicar cada noche gel de aloe vera en tu rostro después de haberlo limpiado bien, a modo de mascarilla hidratante. Esto mantendrá rostro hidratado al mismo tiempo que irá secando tu acné para curarlo en menos tiempo.
Cambia tu funda de almohada. Aunque es recomendable cambiar a menudo las sábanas, cuando tienes problemas de acné, esto es aún más importante. Cambia tu funda de almohada al menos dos veces por semana para evitar que se acumulen en ellas bacterias, polvo u otros de los factores que suelen provocar el acné. Así te será más fácil mantener tu rostro limpio y desinfectado.
Lleva una alimentación saludable. Como hemos mencionado al principio del artículo, una mala alimentación es uno de los factores más en las personas que sufren acné. Por eso, si nuestra piel es propensa a desarrollar acné, debemos prestar especial atención a nuestra alimentación para evitar que tengamos este problema. En esta tipo de alimentación saludable es esencial tomar vitamina C y ácidos grasos omega 3. Además, debemos evitar a toda costa los azúcares refinados y la comida basura, eligiendo siempre alimentos frescos y basando nuestra dieta en los vegetales y las carnes magras para evitar las grasas.
Pide consejo a un profesional. Aunque no se trate de un problema de salud grave y afecte sobre todo a nivel estético y personal, acudir a un médico para que nos aconseje acerca de cómo curar el acné es muy importante, ya que puede mejorar nuestra calidad de vida. Si sigues todos los consejos anteriores y tu piel sigue teniendo acné, lo mejor es que acudas a un dermatólogo que pueda recetarte algún tipo de medicamento especial para tratar el acné. Los productos contra el acné que contienen peróxido de bezoílo suelen ser muy efectivo y funcionar bien en todas las personas que lo sufren. Sin embargo, no debes comenzar un tratamiento duro contra el acné sin consultar primero a un médico.
Si quieres empezar a curar tu problema de acné, es momento de que te tomes muy en serio estos consejos. Aspectos como la dieta y la higiene pueden ser determinantes para tratar una piel propensa al acné. En algunos casos, puede que el motivo de tu brote de acné sea otro, como por ejemplo los desajustes hormonales, en cuyo caso tendrás que seguir las indicaciones concretas de un médico para tratar el acné.