Vivir hasta los 100 años es reducir este ingrediente común, revela un nuevo metaestudio sobre centenarios
Las nuevas investigaciones sobre el envejecimiento han ido desvelando muchos secretos ocultos, como que el envejecimiento biológico puede invertirse eliminando un ingrediente de la dieta o cuál es el ejercicio más eficaz para potenciar la función cognitiva. Ahora se revelan los ingredientes para superar los cien años de edad.
Auge de la población centenaria
En 2021 había más de 570.000 centenarios, una cifra elevada si se tiene en cuenta que en 2000 solo había 150.000 centenarios. Para 2050, se espera que casi 3,7 millones de personas lleguen a vivir 100 años. Japón tiene actualmente el mayor número de personas per cápita que superan la marca del siglo. La ciudad japonesa de Okinawa está considerada una "zona azul", un área donde la esperanza de vida es superior a la media.
Una revisión de 34 estudios observacionales, publicada por Springer Link, señala que para llegar a los tres dígitos de edad hay que tener en cuenta un par de factores. Según el estudio, los centenarios y casi centenarios siguen una dieta variada y equilibrada, que incluye verduras y frutas junto con alimentos ricos en proteínas, como aves de corral, pescado y carne roja. El estudio reveló además que los centenarios obtienen entre el 12% y el 32% de su energía de las proteínas, entre el 57% y el 65% de los carbohidratos y entre el 27% y el 31% de las grasas. Este hábito alimentario concreto se ha asociado a menores probabilidades de deterioro físico y mortalidad. El envejecimiento biológico puede invertirse eliminando un ingrediente de la dieta, según un nuevo estudio Las comunidades más antiguas del mundo revelan cómo se puede vivir hasta los 100 años Una dieta baja en sal es también la clave para una larga vida, ya que el estudio demostró que los centenarios consumen menos de 2 g de sodio al día, que es también la recomendación de la OMS. Los que consumían más sal o preferían los alimentos salados tenían un riesgo 3,6 veces mayor de deterioro de la función física. Nadie está libre de enfermedades crónicas. Como muestra el estudio, menos de la mitad de las personas padecen problemas comunes como demencia (41%), hipertensión (43%) y diabetes (22%). Aunque los centenarios no escapan a estas afecciones, suelen desarrollarlas mucho más tarde en la vida en comparación con otros adultos. Los resultados también muestran que los centenarios tomaban una media de 4,6 medicamentos, mientras que los no centenarios utilizaban más, con una media de 6,7. La observación de que los centenarios suelen necesitar menos medicamentos sugiere una mejor salud y una menor incidencia de problemas médicos. Ahora bien, ¿quién puede negar los beneficios de dormir bien? No sólo prolonga años de buena salud, sino que también ayuda con el peso, las hormonas del estrés, la diabetes, la presión arterial y el rendimiento mental y físico. El estudio señalaba que el 68% de los centenarios estaban satisfechos con la calidad de su sueño, lo que sugiere que dormir bien contribuye al bienestar general y a una larga vida. ¿Se ha fijado alguna vez en su entorno? ¿Es demasiado ruidoso o contaminado? Si es así, quizá merezca la pena mudarse a un lugar más tranquilo y limpio. Las investigaciones demuestran que más del 75% de las personas que llegan a los 100 años o casi tienden a vivir en zonas rurales y en un entorno verde. Se ha demostrado que estar en un entorno natural reduce el estrés y la depresión en algunos casos, lo que a su vez ayuda a alargar la vida. Los estudios también indican que abstenerse de fumar, consumir poco o nada de alcohol, mantenerse físicamente activo y mantener fuertes lazos sociales son factores cruciales para aumentar la probabilidad de llegar a los 100 años. Vivir más allá de los 100 años tiene sus retos, pero los beneficios son igualmente significativos. La vida, en esencia, es tiempo -tiempo para vivir, reír y amar- y muchos de los que han alcanzado el notable hito de los 100 años abrazan esta filosofía.Related Stories
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