Una mujer muere tras comer una tostada que desgarró su esófago
Un hospital de Gales ha sido testigo de uno de los casos más extraños a los que sus médicos se han enfrentado en años, el de una mujer que muere tras comer una tostada que desgarró su esófago.
Vera Williams, una mujer de Gales de 75 años de edad ha fallecido de la forma más extraña posible: Por culpa de una tostada. Tras acudir tres veces a diferentes hospitales quejándose de padecer fuertes dolores de garganta, le diagnosticaron que sufría una simple infección y le recetaron unos antibióticos. Sin embargo, en su última visita al hospital, cuando los dolores en su garganta y en el estómago ya eran insoportables, los médicos descubrieron que tenía varios desgarros intestinales y en su esófago cuando ya era demasiado tarde. La paciente fallecería poco después a causa de las hemorragias intestinales que sufrió durante días, y que ningún médico supo diagnosticar.
En un suceso de lo más extraño, ya que los médicos aseguran que este tipo de casos sólo se dan en 3 de cada millón de pacientes, la investigación abierta para determinar si ha habido negligencia médica ha exonerado de toda responsabilidad a los doctores, ya que según los investigadores, los médicos no habrían podido hacer nada de haber dado con la causa del malestar a tiempo. Es decir, que la principal y única responsable es la maldita tostada.
Un caso de lo más marciano en el que la fragilidad de la vida queda más que demostrada por culpa de un simple trozo de pan. Ya te hemos contado que la mala alimentación es la principal causa de muerte prematura en el mundo, y ahora, también te advertimos que comer con prisa y sin masticar bien los alimentos puede acabar con tu vida. La muerte de esta mujer tras comer una tostada que desgarró su esófago es una prueba de lo más convincente.