Un arbitro de la NBA sale del armario después de ser insultado
Un arbitro de la NBA sale del armario cuando es gravemente insultado por un jugador
Hay comportamientos que no se deben tolerar y, mucho menos, cuando tienen lugar en acontecimientos públicos a los que asiste mucha gente, que son televisados y donde debería rendir el respeto, la camaradería y las buenas maneras. Un jugador de la NBA del equipo Sacramento Kings, Rajon Rondo, se dedicó a insultar al arbitro que se encontraba juzgando el encuentro, llamándolo, textualmente, "Eres un puto maricón de mierda, eres un puto maricón, Billy". Acto seguido, como no podía ser de otro modo, Bill Kennedy, que así se llama el arbitro, se dispuso a expulsar del estadio al jugador, que había hecho gala de un comportamiento, a todas luces, censurable y reprobable.
Jason Collins, primer jugador NBA que salió del armario, se retira
Este ciclista sale ileso después de que un peligroso truco le salga mal
Justo días después del suceso, Bill Kennedy decidió publicar una carta en el sitio de deportes de Yahoo! en la que salía del armario.
"Me siento orgulloso de ser un árbitro de la NBA y me siento orgulloso de ser un hombre gay. Estoy siguiendo los pasos de otros que se han identificado con la esperanza de que esto enviará un mensaje a hombres, mujeres y jóvenes en los deportes de que no deben permitir que nadie te haga sentir avergonzado de quién eres", dijo Kennedy en un artículo de opinión publicado en Yahoo! Sports".
Sus compañeros de profesión no desaprovecharon el momento para dedicarle unas palabras de afecto. El consejero general de la Asociación Nacional de Árbitros de Baloncesto Lee Seham, declaraba:
"Los árbitros de la NBA respaldamos a Bill Kennedy por el trabajo que hace y por quién es".
Salir del armario es una cuestión personal que solo atañe a uno mismo, pero que gente pública decida hacerlo, como el caso de este arbitro o del jugador de la NBA Jason Collins, afectan de manera positiva a la normalización de la homosexualidad. Este tipo de comportamientos deben tener su castigo. Bill Kennedy, arbitro de la NBA que ha salido del armario, se comportó como una persona ha de hacer: con dignidad y educación. Mucho tienen que aprender de él.
