Progress Not Perfection in 2025
¿Ha fijado ya sus propósitos para el Año Nuevo? Yo no.
Cada año, cuando llega el 1 de enero, todo el mundo empieza a hablar de cómo va a cambiar con respecto al año anterior. El calendario empieza de nuevo, y tenemos el impulso de embarcarnos en mejoras para que el año vuelva a empezar. En teoría, tiene sentido: "Año nuevo, yo nuevo".
Pero la realidad es otra.
Lessons in Resilience
Fallen Down But Not Destroyed
Es mucha presión y estrés para uno mismo, sobre todo si vive con una discapacidad como la miastenia gravis (MG). Este es uno de los motivos por los que no me gustan los propósitos de Año Nuevo.
Creo que los cambios no se producen de la noche a la mañana. Mi mentalidad al entrar en el nuevo año es celebrar el progreso y no la perfección. Así es como pienso conseguirlo.
Celebra las pequeñas victorias. Es importante reconocer los logros, por grandes o pequeños que sean.
Después de reflexionar sobre mi último año, me doy cuenta de que no lo celebro lo suficiente. Recuerdo días en los que no podía levantarme de la cama. Ahora soy propietaria de un negocio y me pagan por compartir mis experiencias. Eso es algo de lo que sentirse orgulloso.
Creo que celebrar las pequeñas victorias te ayuda a mejorar tu visión de la vida. Me siento motivada y más segura de mí misma cuando practico esto.
Celebra el progreso, no la perfección. No me comparo ni comparo mi situación con la de los demás. Dicen que la comparación es el ladrón de la alegría, y estoy totalmente de acuerdo.
Mi vida es diferente a la de muchos de mis compañeros. He tenido momentos de vergüenza por necesitar ayuda hasta bien entrada en la veintena. Cuando me sorprendo sintiéndome insegura sobre mi progreso, recuerdo que el viaje de cada persona es único.
No hay una única forma de vivir la vida. Y, sinceramente, lo más importante es que la disfrutes.
Encuentra la alegría en el proceso. Cuando estoy obsesionada con alcanzar un objetivo, no suelo disfrutar del camino que me lleva a conseguirlo. Estoy trabajando para ser consciente y estar presente en el momento, en lugar de fijarme en los resultados. Mi objetivo es disfrutar más de la vida.
Esforzarse por progresar en lugar de perfeccionarse consiste en abrazar el camino, celebrar las pequeñas victorias y no compararse con los demás. Si te centras en aprender de los errores, en estar presente en cada momento y en encontrar la alegría en el camino, puedes sentar las bases de una vida más plena y equilibrada.
El progreso no es lineal, pero siempre es significativo. Me comprometo a valorar los pasos que doy tanto como el destino.
