Los 7 mejores trucos para estudiar mejor
¿Necesitas más concentración? Te damos los 7 mejores trucos para estudiar mejor.
Todos hemos tenidos que enfrentarnos alguna vez a algún examen tan complicado como importante para nuestro futuro. Pero no todos conocemos las mejores técnicas para estudiar y, si no estás habituado a ello, concentrarte y aprovechar bien el tiempo puede volverse una tarea realmente complicada. Lo primero que hacemos todos cuando empezamos a estudiar es tratar de memorizar lo que estamos leyendo. Sin embargo, con el tiempo, te vas dando cuenta de que esta técnica no da resultado, especialmente cuando te pones ante un temario difícil y largo. Pero a pesar de lo común que resulta sentarse frente a un libro y a un montón de apuntes para estudiar y prepararte un examen, en los colegios e institutos no suelen dedicar un tiempo a explicar las mejores técnicas y trucos para ello, algo que facilitaría en gran medida la vida de los estudiantes. Pero aún estás a tiempo de aprender. Si estás preparándote unas oposiciones y enfrentándote a los últimos exámenes en la universidad, tenemos algunos trucos que pueden ayudarte a sacarle más partido a tu tiempo de estudio y, por supuesto, a aprobar. Que es de lo que se trata.
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1. Ponte pequeñas recompensas. Seguramente tengas que dedicar muchas horas al día al estudio si te estás preparando para algo importante. Pero pensar en que te quedan ocho horas de estudio por delante puede ser muy desmotivante, especialmente cuando llevamos muchos días seguidos siguiendo esta rutina. Para que esto no ocurra y mantengas la motivación, puedes ponerte pequeñas recompensas cada cierto tiempo. Por ejemplo, un pequeño descanso tras completar una hora, llamar a un amigo o a tu pareja tras cumplir tres horas o bajar a pasear al perro después de cierto tiempo. Así medirás en periodos más cortos el tiempo que te queda por delante y se te hará menos duro pensar en ello. También puedes hacer un plan que te motive y te haga ilusión para cuando acabe tu jornada. Como por ejemplo, una cena con tu pareja o ver una película con algún amigo. Así conseguirás despejar tu mente para volver a estudiar al día siguiente.
2. Elimina todas las distracciones. Cuando nos sentamos a estudiar, no obtenemos el estado máximo de concentración hasta pasados unos diez minutos aproximadamente. Esto quiere decir que, si a los cinco minutos de abrir tu libro miras el móvil, tendrás que volver a empezar a concentrarte desde cero cuando vuelva a ello.
Para que esto no ocurra y el tiempo de estudio, ya sea en casa o en la biblioteca, nos cunda durante todo el tiempo, es necesario que elimines todas las distracciones que tengas a tu alcance. Especialmente las siguientes: el móvil, las redes sociales y la televisión. Guarda el móvil en tu bolso o en algún sitio donde no puedas verlo. Por supuesto, manténlo en silencio durante todo el rato que estés estudiando.
Si necesitas el portátil para estudiar, cierra todas las redes sociales y las aplicaciones que puedan enviarte notificaciones. Tampoco te sientes nunca cerca de una televisión encendida.
3. Planifica tus días de estudio. Si tienes que estudiar mucha materia, te agobiarás solo de pensarlo. A no ser que lo dividas en grupos y te lo administres poco a poco. Planificando lo que vas a estudiar cada día conseguirás ver el total como algo menos denso y te será más fácil afrontar cada día de forma positiva y con ganas
4. Cambia de lugar de estudio. Alterna tu casa con la biblioteca o una biblioteca con otra. Estar sentado durante semanas en el mismo sitio puede resultar agobiante y fatigante. Además, cambiar de lugar de estudio ayuda a mejorar nuestra atención.
5. Si vas a escuchar música, que sea la adecuada. Si te gusta escuchar música mientras estudias, está bien, pero elige antes de empezar cuál es la que vas a escuchar y no estés pendiente de cambiarla durante todo el rato. Programa una lista de reproducción que dure el tiempo que vas a dedicarle al estudio.
Puedes escuchar pop, electrónica o rock si es lo que te apetece, aunque lo ideal es la música clásica o relajante. Si no conoces esta música o no tienes ningún disco de este estilo, prueba a buscar en youtube “música relajante”.
6. Empieza a estudiar con mucho tiempo. Los conocimientos se asientan mucho mejor a largo plazo. Cuanto antes empieces a estudiar, más fácil será el proceso. Evita estresarte la semana previa al examen y empieza a estudiar poco a poco desde el momento en que sabes que tienes que examinarte. Así podrás ir más despacio y relajado y tus conocimientos se asentarán mejor y con menos esfuerzo.
7. Haz algo de ejercicio antes del examen. Según un estudio de la Universidad de Illinois, haces unos 20 minutos de ejercicio antes de un examen puede hacer que mejore nuestro rendimiento. Lo cierto es que el deporte ayuda a combatir el estrés y la ansiedad, algo que no nos viene nada bien cuando vamos a examinarnos de algo importante. De ahí que nos ayude a afrontar el momento con mucha más calma y concentración. Si has estudiado bien durante el tiempo necesario, no hará falta que pases el día previo al examen encerrado en casa intentando memorizar las últimas páginas de tus apuntes. De hecho, será mucho más productivo que des un paseo, camines o vayas a correr un rato.
Estos trucos para estudiar te ayudarán a mejorar tu rendimiento y tu concentración. ¡Tú puedes!
