Las muertes por ahogamiento en Estados Unidos en aumento por primera vez en décadas

Las muertes anuales por ahogamiento en EE. UU. han aumentado por primera vez en décadas, según nuevos datos publicados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

Más de 4,500 personas murieron debido a ahogamientos no intencionados cada año entre 2020 y 2022, un aumento con respecto a 2019, cuando aproximadamente 4,000 personas murieron por ahogamiento. El mayor aumento en las muertes se produjo en grupos que ya estaban en mayor riesgo de ahogamiento; estos incluyen a niños menores de 4 años y adultos mayores de 65 años de todas las razas y etnias, así como a personas afroamericanas de todas las edades.

Desglosado por grupos de edad, las tasas de ahogamiento más altas ocurrieron entre los niños de 1 a 4 años. El ahogamiento es la principal causa de muerte en ese grupo de edad. Por raza y etnia, las tasas más altas se observaron entre las personas afroamericanas y los nativos americanos o nativos de Alaska.

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El reciente aumento en las muertes puede estar relacionado con las interrupciones en la infraestructura causadas por la pandemia de COVID-19, sugirieron los investigadores en un informe publicado en línea el 14 de mayo. En particular, el acceso a salvavidas, clases de natación y entornos de natación supervisados disminuyó a medida que las personas pasaron más tiempo libre en o cerca del agua, dijeron.

Para obtener las nuevas cifras, los investigadores analizaron datos del Sistema Nacional de Estadísticas Vitales, que contiene el registro más completo de las muertes en EE. UU. y sus causas. Para el nuevo informe, los investigadores del CDC compararon las tasas de muertes por ahogamiento no intencionado reportadas en 2019, antes de que comenzara la pandemia, con las registradas en 2020, 2021 y 2022.

Los niños de 1 a 4 años experimentaron un aumento de aproximadamente el 28% en las muertes por ahogamiento en 2021 y 2022, encontraron los investigadores. Los adultos mayores de 65 años tuvieron la segunda tasa de ahogamiento más alta en todos los años y también experimentaron aumentos significativos en comparación con 2019. Por ejemplo, las personas de 65 a 74 años tenían un 19% más de probabilidades de ahogarse en 2022 que en 2019, y las personas mayores de 85 años tenían casi un 50% más de posibilidades de ahogarse en 2021 que en 2019.

Las personas de 15 a 34 años experimentaron el mayor aumento en las muertes por ahogamiento entre 2019 y 2020. Basándose en datos anteriores, los investigadores sospechan que el uso de alcohol pudo haber influido en este aumento, aunque el uso de alcohol no se tuvo en cuenta específicamente en el nuevo estudio.

Las tasas de ahogamiento entre las personas nativas americanas o nativas de Alaska no aumentaron entre 2020 y 2022, pero estas personas seguían siendo más propensas a ahogarse que cualquier otra raza o etnia, como se ha visto en informes anteriores, encontró el CDC. Las segundas tasas de ahogamiento más altas por raza se observaron entre las personas afroamericanas, con un aumento del 28% en 2021 en comparación con 2019.

El CDC también evaluó la capacidad de natación de las personas con una encuesta nacional. La agencia estima que alrededor de 40 millones de adultos en EE. UU. no saben nadar, según el 15.4% de los encuestados en la encuesta que dijeron que no sabían hacerlo. Más del 50% de los encuestados declaró que nunca habían recibido clases de natación.

Las barreras sociales y estructurales aún limitan el acceso de las personas a la capacitación en natación y seguridad en el agua, escribió el CDC en el informe. Esta falta de acceso refleja disparidades en las tasas de ahogamiento; por ejemplo, más adultos afroamericanos que adultos blancos informan no saber nadar o nunca haber tomado una clase de natación. Abordar estas barreras podría ayudar a reducir las tasas de ahogamiento, dijo el CDC.

Mientras tanto, la agencia recomendó varias formas en que las personas pueden protegerse a sí mismas y a sus seres queridos del ahogamiento, como instalar cercas de cuatro lados alrededor de las piscinas, asegurarse de que los niños estén siempre supervisados mientras estén en el agua y usar chalecos salvavidas mientras navegan.