Exercise for Managing Crohn's Symptoms
Cuando se tiene Crohn, el ejercicio puede hacer mucho por uno. La investigación ha demostrado que puede ayudar a reducir la inflamación, mejorar la función inmune, ayudar en la digestión, y reducir el riesgo de otras enfermedades gastrointestinales como el cáncer colorrectal. Pero a muchas personas con Crohn (incluyéndome a mí) les puede resultar muy difícil hacer ejercicio cuando están lidiando activamente con dolor extremo, diarrea, náuseas o cualquiera de los otros síntomas divertidos del Crohn.
Entonces, ¿cómo se supone que debes hacer ejercicio? Tal vez estés atravesando un brote y tengas síntomas la mayor parte del tiempo. Cuando ésta es tu vida, no hay nada peor que intentar salir a correr y sentir que vas a vomitar (o algo aún peor) en cualquier momento.
En mi caso, me he dado cuenta de que mis peores días son aquellos en los que estoy sentada todo el día. Tal vez he estado en el trabajo todo el día, e inmediatamente después voy a casa, hago la cena y veo la televisión hasta la hora de acostarme. Es probable que sólo camine unos 3.000 pasos en todo el día. Es en esos días cuando físicamente me siento peor. Pero cuando estoy activo durante todo el día, sin hacer demasiadas actividades realmente extenuantes, me siento increíble. Y esto ha sido el 100% del tiempo para mí durante mis días activos.
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Así que esto tiene un lado bueno y uno malo. El bueno es que tener un estilo de vida activo es clave para una salud óptima y para controlar las enfermedades crónicas. No sólo lo he comprobado yo, sino también muchas otras personas. El lado malo es que ¦ ¡esto no es realista! Todos tenemos que trabajar y ganar dinero de alguna manera. Si todos pudiéramos pasar cada día de nuestras vidas haciendo cualquier cosa que quisiéramos hacer, sería fácil llenar nuestros días con mucha actividad y movimiento. Pero a menos que me toque la lotería mañana, eso no va a ser posible.
Como solución de compromiso, he buscado formas de hacer ejercicio para controlar los síntomas y sentirme mejor físicamente en general. Algo que he descubierto para aliviar mis síntomas de Crohn (incluso durante un brote activo) es ejercitarme lo suficiente como para que mi frecuencia cardíaca supere los 150 latidos por minuto, incluso si me siento muy mal. Hay veces que me siento tan mal que ni siquiera puedo salir de la cama, pero me obligo a salir y empezar a correr. Aunque parezca una locura, ¡funciona casi siempre!
Sí, los primeros minutos son horribles. Pero una vez que soy capaz de superarlos, empiezo a sentirme genial, y normalmente sigo sintiéndome genial durante el resto del día. Este ha sido esencialmente mi método desde hace un par de años para aliviar los síntomas. Prefiero hacer ejercicio para sentirme mejor en lugar de tomar una medicación que, de todos modos, desaparecerá al cabo de unas horas.
Obviamente, hay un punto en el que tienes que considerar si te estás excediendo o si es seguro forzarte tanto. Tienes que conocer y comprender tus propios límites. Y, por supuesto, siempre es importante hablar con el médico antes de probar algo nuevo.
Yo sólo puedo hablar por mí y por lo que me ha funcionado, y ésta ha sido la mejor manera que he encontrado de controlar mis síntomas de Crohn y de mejorar mi calidad de vida en general. Siempre llevo mi cuerpo al límite, y poder ver de lo que soy realmente capaz se ha convertido en una importante herramienta terapéutica para mí.
