El hombre al que casi le explota su pene tras inyectarse viagra
Cuidado con los alardes porque los intentos de un hombre de ser el mejor en la cama casi le cuestaN su más preciado tesoro: La increíble historia del hombre al que casi le explota su pene tras inyectarse viagra.
Bajo el anónimato del foro Reddit, un hombre de 31 años con el alias «SoreCock» -dolor de pene-, ha contado las consecuencias de una terrible idea que tuvo: Inyectarse Viagra en el pene sin sufrir de disfunción eréctil para conseguir que su miembro estuviese en acción el mayor tiempo posible. Vaya locura, ¿verdad?
Para ponerlo todo en un contexto, el protagonista de esta escabrosa historia cuenta que junto con su pareja, una joven de 27 años, habían descubierto una nueva afición juntos: Acudir a clubs de intercambios de pareja, y dispuesto a ser el rey de la orgía, acudió a un urólogo sin padecer disfunción eréctil para doparse salvajemente.
En su primera visita, el médico le recetó pastillas de Viagra, pero decepcionado con los nulos resultados, el "héroe" acudió nuevamente al médico, que esta vez le recetó algo más "potente", Trimix, la Viagra que se inyecta. Ahí empezaba la placentera pesadilla, ya que más allá de sus expectativas, y tras cuatro horas de erección, estuvo a punto de perder su miembro. En su post en el foro describe sus desesperados intentos de poner fin a la lujuría: «Probé a poner hielo encima del pene, empecé a hacer ejercicio físico para que la sangre fluyera por otras partes, e incluso llegué a tomar cuatro pastillas que en internet ponían como remedio para calmar la erección».
Pero nada de eso funcionó, y al ver que era imposible domar a la "bestia", el hombre decidió acudir a un hospital en el que los médicos, perplejos por el terrible dolor que estaban presenciando, sólo hallaron una solución: Drenar la sangre del pene. Nos gusta imaginar que los doctores se reunieron en una sala delante de una pizarra proponiendo soluciones como en un capítulo de "House" mientras el protagonista, en la sala de mergencias, está viviendo el peor día de su vida, ya que, según sus propias palabras, "sintió que su pene estuvo a punto de explotar".
Una experiencia terrorífica que, sin embargo, parece no haber causado tanta huella en el autor de tamañana estupidez, ya que cuenta que está dispuesto a repetir, aunque con más control: "la próxima vez me inyectaré sólo la tercera parte de la dosis". El ser humano dispuesto a topezar con la misma piedra una vez más. Algo que no nos extraña viniendo del hombre al que casi le explota su pene tras inyectarse viagra.
