Consejos para aliviar el dolor de espalda

¿Cómo aliviar el dolor de espalda? Toma nota de los mejores consejos.

El dolor de espalda es uno de los más comunes hoy en día. Las malas posturas o el exceso de horas sentados frente al ordenador han convertido este dolor en una de las primeras causas por las que pedimos baja por enfermedad en el trabajo. Aunque es un dolor común que puede estar causado por muchas cosas diferentes, hay que controlarlo y acudir a un médico si es necesario para asegurarnos de que no se trata de un síntoma de una enfermedad como la artritis, la osteoporosis o de algún problema en la columna vertebral.

En la mayoría de los casos, los dolores de espalda pueden aliviarse en casa con reposo y algunos remedios. En la farmacia puedes encontrar analgésicos que puedes ayudarte a aliviar tu dolor de espalda, pero te recomendamos que consultes con un médico si es dolor es muy agudo. Él podrá recomendarte qué tomar para tu dolor.

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Si lo prefieres, puedes probar a combatir este incómodo dolor con ejercicios para el cuello y la espalda o con remedios naturales. Esto es lo que te proponemos en este artículo, por lo que, si estás sufriendo dolores de espalda y no sabes cómo aliviarlos, aquí van algunas recomendaciones.

Infusiones de hierbas antiinflamatorias. Ya sabes que existen hierbas naturales para casi todo tipo de dolencias, y también hay algunas que pueden ayudarte a que tu dolor de espalda se reduzca o desaparezca. Las más apropiadas para combatir este dolor son la albahaca, la corteza de sauce, el cardamomo, la canela, el jengibre o el clavo de olor. Puedes preparar infusiones con estas hierbas y tomarla antes de que tu dolor se vuelva más intenso.

Realiza estiramientos para tu espalda. Estirar los músculos de tu espalda para relajarlos puede hacer que tu dolor se alivia. Muchas veces el dolor es el resultado de una gran carga de tensión y estrés sobre nuestro cuello y espalda, por eso necesitamos relajar los músculos cuanto antes. Realiza el entrenamiento que de damos a continuación tres veces al día.

· Comprime tus omóplatos con firmeza, mantén la postura de 5 a 10 segundos y suéltalos.

· Coloca tus manos detrás del cuello y flexiona la espalda hacia atrás con cuidado.

· Sentado en una silla, cruza los brazos sobre tu pecho y gira el torso suavemente hacia un lado y después hacia el otro.

Estos ejercicios relajarán los músculos de tu espalda y los estirarán para evitar que continúe el dolor.

Haz estiramientos con el cuello. Muchos dolores de espalda vienen por problemas en el cuello y también al contrario, por lo que no debemos olvidarnos del cuello siempre que estemos tratando de relajar nuestra espalda. Para relajar tu cuello, realiza distintos estiramientos. Primero gira suavemente tu cuello hacia los lado varias veces. Luego cambia el movimiento e inclínalo llevándolo a cada hombro varias veces. Realiza también movimientos suaves hacia delante y hacia detrás y, por últimos, movimientos circulares en los dos sentidos. Tómate tu tiempo para hacer estos ejercicios de forma suave y relajada y notar cómo los músculos de tu cuello y tu espalda empiezan a relajarse.

Aplica frío o calor. Tanto el calor como el frío son capaces de aliviar los dolores musculares. Puedes probar ambos para saber cuál es el que mejor te funciona, ya que esto dependerá de si tu dolor es más o menos agudo, o de si es crónico. Aplica una compresa fría o una bolsa de hielo envuelta en un paño sobre la zona de tu espalda dolorida y déjala ahí unos 15 minutos. Repite esto cuatro o cinco veces al día, cuando sientas dolor. Para aplicar calor, hazlo usando una bolsa de agua caliente o una almohadilla térmica, manteniéndola en tu espalda uno 30 minutos. Repítelo también varias veces al día para combatir el dolor.

Recibe un masaje. Acudir a un buen profesional para que nos de un masaje puede ser una de las mejores opciones para combatir el dolor. Una buena terapia a base de masajes conseguirá relajar tus músculos y eliminar poco a poco ese dolor que te está torturando. Es importante que acudamos a un buen profesional, ya que el masaje de alguien que desconozca la técnica podría acabar dañando tu espalda aún más. Después de varios masajes, notarás como puedes recuperar tu vida normal y las diferentes partes de tu espalda han recuperado su movilidad.

Fortalece tu espalda. Si acudimos a un fisioterapeuta para calmar nuestros dolores de espalda, él sabrá darnos las herramientas para fortalecerla y así evitar que estos dolores continúen. A diferencia del masajista, el fisioterapeuta te propondrá los ejercicios a realizar y serás tú mismo quien tenga que llevarlos a cabo.

Aunque los dolores de espalda son algo bastante común, hay personas que tienen más riesgo de sufrirlos. Las personas con sobrepeso, las embarazadas o los que trabajan con trabajos manuales son más propensos a sufrir estos dolores. No olvides acudir a un médico para explicarle tus síntomas si, después de un tiempo, no consigues deshacerte del dolor.

Además de estos consejos para aliviar el dolor de espalda, mantente en forma y cuida tu peso para evitar los dolores de espalda.