¿Cómo aliviar los dolores de brazos?
¿Cómo aliviar los dolores de brazos y por qué se originan?
Los dolores de brazos pueden aparecer por diferentes motivos. En general, suelen darse en deportistas que utilicen su brazo a menudo o en trabajadores que realicen movimientos muy repetitivos a diario con el mismo brazo. Esto da lugar a molestias, calambres, inflamación y dolor más o menos intenso dependiendo de cada caso.
Cuando aparecen estos dolores, lo ideal es que acudamos a un médico, especialmente si se trata de dolores muy intensos e insistentes que no se alivian en varios días. Pero en los casos de dolores menos fuertes, podemos intentar hacer algo en casa para que se alivie cuando antes y podamos seguir realizando nuestra rutina diaria con normalidad.
Cómo aliviar los dolores anales con remedios caseros
Cómo aliviar los dolores de oído con remedios naturales
El primer paso para tratar de aliviar los dolores de brazos es identificar de qué tipo de dolor se trata. Estos son los casos más frecuentes de dolores de brazo.
Tipos de dolor de brazos
Esguince. Cuando las fibras musculares se rompen, se tuercen o se produce un estiramiento de las mismas aparece un esguince. El esguince no es una lesión demasiado grave y no durará demasiado tiempo, aunque si el dolor de alarga demasiado tiempo es recomendable que acudamos a un médico. Los síntomas característicos del esguince son el dolor, la inflamación en la zona, las contusiones o la limitación de la movilidad. Si tu dolor es fruto de un esguince, deberás guardar reposo durante varios días para que cure. Pasado este tiempo deberás hacer rehabilitación para recuperar la normalidad en tus movimientos.
Codo de tenista. Se le conoce como codo de tenista o codo de golfista porque es una lesión típica en estos deportes. Se trata de una tendinitis en el codo que puede llegar a causar mucho dolor y durar incluso varias semanas, incluso meses. El motivo por el que aparece esta tendinitis es por el uso excesivo de la articulación del codo, de ahí que se atribuya a este tipo de deportes o movimientos. Debes cuidar mucho el brazo lesionado si quieres que la lesión no dure demasiado tiempo.
Bursitis. Las bursas son pequeñas bolsas de líquido que tenemos en las articulaciones para protegerlas. Cuando estas bolsas se lesionan, la cantidad de líquido que contienen aumenta y esto provoca mucho dolor en la articulación afectada. Si tu articulación se ve roja e inflamada y te duele presionarla, es probable que lo que te ocurra sea bursitis. Esta lesión también aparece cuando realizamos un mismo movimiento de forma repetitiva y, al ser muy dolorosa, conviene que acudamos a un médico para que nos aconseje sobre su tratamiento.
Dolor nervioso. Otro de los motivos por los que pueden dolernos los brazos y que no tiene nada que ver con el deporte o los movimientos es el dolor nervioso. Estos dolores suelen aparecer en las personas de edad avanzada y van acompañados de un hormigueo en la zona dolorida. Para tratarlo, lo más recomendable son los analgésicos.
Cómo aliviar el dolor de brazo
No hagas ejercicio. Sea cual sea la causa de tu dolor, es importante que mantengas reposo y no hagas ejercicio hasta recuperarte. Con ejercicio no nos referimos únicamente al gimnasio, tampoco debes levantar peso en casa o hacer movimientos repetitivos con el ratón.
Véndate el brazo. Un vendaje elástico ayudará a proteger tu brazo dolorido. Recuerda que no debe estar muy apretado porque podría ser contraproducente y provocarte más dolor o hinchazón. Si no sabes cómo colocar el vendaje correctamente, acude a un profesional para que él lo haga.
Quítate las joyas. Si tu brazo se hincha por la lesión, es importante que no tengas pulseras, anillos o brazaletes que puedan quedársete atrapadas.
Usa un cabestrillo. Un cabestrillo te ayudará a mantener el brazo en la misma posición y en completo reposo si tu lesión lo requiere. Si después de dos días usando cabestrillo no consigues que tu dolor se alivie, acude a un médico para que te aconseje.
Coloca el brazo en alto. Dormir con el brazo colocado por encima de tu pecho ayudará a reducir la inflamación. Colocarlo a la altura del pecho o ligeramente por encima será suficiente, ya que si lo colocas demasiado arriba su posición podría afecta al flujo de sangre y dificultar la circulación.
Aplica frío. Si además de sentir dolor observas que tu brazo está inflamado, es recomendable que recurras al frío para bajar la inflamación. Utiliza hielo envuelto en un paño o compresas frías para colocarlas sobre la zona inflamada y manténlo ahí durante 20 minutos como máximo. Puedes repetir esta operación varias veces al día, pero no debes mantener el frío en tu piel más de 20 minutos cada vez.
Alterna frío y calor. Pasadas 48 horas desde la lesión, puedes empezar a alternar baños de agua fría y de agua caliente para aliviar la inflamación. Esto te ayudará también a recuperar la circulación en tu brazo dolorido. Si después de varios días aplicando agua caliente y fría sobre tu brazo continúa inflamado, no dudes en acudir a un médico.
Los analgésicos de venta libre también pueden ayudarte a aliviar los dolores de brazo. Si tienes cualquier duda sobre tu dolor o no se alivia después de 48 horas, acude a un médico.
