Por qué Iker Casillas arrasa en Oporto
Tres meses después de su fichaje el guardameta ha enamorado a todos en Portugal. Te explicamos por qué Iker Casillas arrasa en Oporto.
Ya conocido como "el efecto Casillas", el guardameta de Móstoles vuelve a mostrar su mejor nivel, está llenando las arcas de su nuevo club hasta límites insospechados y sus buenas actuaciones le están valiendo un hueco de honor en el corazón de los aficionados. Porque al margen de los méritos deportivos, los números son la más clara de las evidencias.
Con tres meses cumplidos desde que el guardameta saliera del Real Madrid para defender la portería del Oporto, su nuevo club, Iker Casillas se ha convertido en todo un emblema y el gran símbolo del equipo portugués. Con el liderato del equipo tanto en la Liga portuguesa como en su grupo de la Champions con 7 goles recibidos en 9 partidos, incluso los más escépticos con su fichaje, los que criticaban que el club se saltase el límite salarial para desembolsar un dineral por un portero defenestrado en el Real Madrid, se han rendido ante la evidencia. Iker feliz es un Iker mejor, y atrás quedan sus problemas de falta de confianza, sus salidas en falso en los córners y otras tantas "casilladas" fruto de la desconfianza y de los continuos pitos y el abrasador foco de la prensa. Eso en cuanto a lo deportivo, pero no se puede obviar que el fútbol es un negocio en el que la amortización de los fichajes también es fundamental. Pues bien, Iker también arrasa en ese plano. Su camiseta, esa del número 12, es la más vendida del club con unas estadísticas increíbles: 3 de cada 5 camisetas vendidas por el Oporto durante esta temporada llevan su dorsal, algo insólito para un portero, que ha agotado toda la tirada de camisetas previstas para la temporada en apenas 3 meses. Las repondrán en Noviembre, y a buen seguro volverán a agotarse.
Pero eso no es todo, porque el que fuera el mejor portero del mundo durante la década pasada también ha servido como escaparate del Oporto para el resto del mundo, lo que también se traduce en financiación extra por derechos televisivos y retransmisiones. El guardameta ha sacado al Oporto del baúl de los equipos de "segunda clase" de Europa y lo ha puesto en el top de los mediáticos, ya sea por el morbo de seguir viendo a Iker fuera del club de sus amores, o porque quizás el efecto Casillas esté convirtiendo al club luso en un equipo de verdad. Atrás quedan las lágrimas en una fría sala de prensa, porque Iker Casillas arrasa en Oporto y está viviendo una segunda juventud a sus 34 años.
