La polémica en redes sociales por el tuit del perfil oficial del Mónaco
La fase de clasificación de la Champions se ha jugado también en twitter con la polémica en redes sociales por el tuit del perfil oficial del Mónaco.
La agónica victoria del Valencia por 3-1 ante el Mónaco en la fase de clasificación para la Champions League ha generado muchísima polémica por un par de "jugadas" que no se produjeron en el partido, sino a través de Twitter, con dos mensajes que han incendiado las redes sociales y molestado mucho a los aficionados del Valencia a causa de quiénes han sido los emisores de dichos mensajes.
El primero, de Antoine Griezmann, el futbolista francés del Atlético de Madrid, cuando con un tuit publicado pedía muy enfadado un penalti a favor del Monaco en una acción entre Martial y Gayá en el área valencianista con este mensaje:
Todos protestamos por los penaltis no pitados y por las jugadas polémicas de los partidos, pero en este caso se han levantado muchas ampollas porque Griezmann es futbolista del Atlético de Madrid, rivales en Liga, y a la afición ché no le ha gustado nada que vaya en contra de los intereses del club en un partido que a él no le afecta en absoluto.
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Pero el revuelo ha ido mucho más allá porque el propio club monegasco, en un acto sin precedentes, también se ha encargado de protestar por la jugada a través de su página oficial con un community manager que parece dominar los entresijos de internet como pocos con este tuit:
"Si el árbitro hubiese llevado las gafas de nuestro patrocinador Alain Afflelou..."
Protesta por el arbitraje más promoción de su patrocinador, la empresa fabricante de gafas de Alain Afflelou. "Tchin thcin", dos en uno, en un mensaje que ha encendido a la afición valencianista llamando "llorón" al club monegasco. que ha sido trending topic durante toda la noche con infinidad de mensajes con fotos de cajas de pañuelos.
Siempre se había dicho que el fútbol son 90 minutos y que hasta que el árbitro no pite el final del encuentro puede pasar cualquier cosa, pero eso era antes, porque ahora también existen los partidos 2.0, en los que los equipos y jugadores profesionales continúan jugando hasta que se produzca el último retuit o hasta que al último aficionado afectado se le pase el enfado por lo que haya leído en tuiter. Una nueva era que se confirma con la polémica en redes sociales por el tuit del perfil oficial del Mónaco.