Explosión de calorías en este final de balón medicinal

El objetivo de llegar a 50 repeticiones de suelo a hombros es una tarea de enormes proporciones, pero este entrenamiento sube la apuesta al añadir un poco más. Pon en marcha un reloj y haz una flexión de brazos y una sentadilla con el peso del cuerpo al comienzo de cada minuto, antes de acumular tantas repeticiones como puedas con la pelota D. Cada nuevo minuto, añade una repetición adicional a ambos movimientos. ¿Puedes llegar a las 50 elevaciones antes de que los 60 segundos sean absorbidos por los movimientos de peso corporal?

Publicidad - Sigue leyendo debajo 1 UNO Y YA

Sube al suelo y adopta una posición de plancha fuerte con las manos apiladas bajo los hombros. Baja el pecho hasta el suelo antes de volver a subir de forma explosiva. A continuación, salta a tus pies, colócalos a la anchura de los hombros y cae en una sentadilla profunda. Vuelve a levantarte con intención y prepárate para la pelota.

2 RODAR HACIA ARRIBA, RODAR HACIA ARRIBA

Con un press-up y una sentadilla en la bolsa, sitúate sobre el balón, ponte en cuclillas y hazlo rodar de un lado a otro, trabajando con las manos por debajo. Impúlsate con los pies para levantar el balón a muerte antes de dejarlo caer en tu regazo y ponerte en cuclillas. Desde aquí, rodea el balón con los brazos y ponte de pie, aprovechando el impulso para hacerlo rodar hacia arriba y por encima del hombro. Repite la operación sin perder de vista el reloj.

Este entrenamiento con balón medicinal incorpora 5 movimientos no tradicionales para estimular el tronco

¡Ponte en forma con el balón medicinal!

3 TICK, TOCK

Trabaja tantas repeticiones de D-ball como sea posible hasta que el reloj pase a un nuevo minuto. En ese momento, suelta la pelota y ve al suelo para hacer otra ronda de flexiones. Esta vez, haz dos repeticiones antes de ponerte de pie y hacer dos sentadillas. Coge la pelota y vuelve a trabajar inmediatamente, acumulando esas repeticiones. Intenta no perder la cuenta...

4 CUENTA ATRÁS, SUMANDO

Sigue avanzando en esas 50 repeticiones. A medida que transcurre el minuto, detente para realizar las flexiones y sentadillas programadas, añadiendo una repetición adicional cada 60 segundos, antes de volver a iniciar los juegos de pelota. A medida que avanza el tiempo, el trabajo con el peso del cuerpo va a consumir más cada minuto, no sólo dejándote menos tiempo para levantar la pelota, sino también agravando la fatiga en la parte superior del cuerpo y en las piernas. ¿Puedes vencer al reloj?