25 años sin Fernando Martín, pionero del baloncesto español

3 de diciembre de 1989. Era una mañana lluviosa en Madrid. En la M-30, un Lancia Thema perdió el control y acabó impactando contra un Opel, llevándose a la vez consigo la vida de uno de los mejores jugadores de baloncesto que ha dado España. Al aventurero que se atrevió a cruzar el Mediterráneo y a cambiar el jamón serrano por hamburguesas, el que abrió la puerta de la NBA a los Gasol, Calderón y compañía. Un jugador que marcaba diferencias. Serio, pero a la vez admirado. Todo un genio. Ayer se cumplieron 25 años sin Fernando Martín, el pionero del baloncesto español. 

Martín, de 27 años, se dirigía al Palacio de los Deportes, donde el Real Madrid, su Real Madrid de toda la vida, se enfrentaba al CAI Zaragoza. Le tocaba ver el partido desde la grada por culpa de unos problemas en la espalda. El choque no se jugó, al igual que nunca más nadie ha vuelto a lucir su número 10 en una camiseta con el escudo del Madrid al pecho. 

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Fue referente en el Real Madrid, donde ganó cuatro ligas, tres Copas del Rey, dos Recopas y una Copa Korac. Sólo le quedó la cuenta pendiente de la Copa de Europa. También marcó una época en la Selección y formó parte de la primera generación de oro que ha dado ese deporte en España: logró una plata en el Eurobasket de 1983 y otra en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984, el mayor hito del baloncesto español hasta el Mundial ganado en 2006.

Su liderazgo, su carisma, el trabajo y su gran fortaleza física le llevaron a superar una barrera hasta entonces infranqueable. Lo que ahora es un puente aéreo, con vuelos cada dos por tres, entonces fue una ardua travesía que le hizo escribir su nombre en los libros de Historia. Fernando Martín fue el primer español y el segundo europeo en recalar en la NBA, una liga entonces casi precintada para los jugadores extranjeros. Llegó a Portland Trail Blazers, donde apenas tuvo oportunidades por culpa de las lesiones y del mencionado hermetismo. Hizo las maletas y volvió a Madrid, donde de gigante pasó a ser leyenda.